Claves para las Restauraciones Dentales. Basado en la Teoría Oclusal Oclusión Funcionalmente Disocluida (FDO)

1. REFERENCIAS ESTRUCTURALES PARA LA RESTAURACIÓN DE CORONAS

Claves para la restauración con coronas
Concepto de tres planos
Perfil de emergencia

2. FORMA Y FUNCIÓN DELOS DIENTES NATURALES

La importancia de aprender la forma de los dientes naturales.
Incisivo central.
Incisivo lateral.
Canino.
Primer premolar.
Segundo premolar.
Primer molar.

3. PREPARACIÓN DEL DIENTE Y DISEÑO DE CORONA BASADOS EN CRITERIOS CLÍNICOS

Preparación del diente empleando el concepto de tres planos.
Preparación marginal basada en la teoría de formación triangular y la disposición de los materiales de restauración.
Diseño de la estructura en coronas cerámicas.

4.ENCERADO DIAGNÓSTICO MEDIANTE TÉCNICA ESQUELÉTICA

Principios de la posición de trabajo y funcionamiento de los dedos.
Procedimientos de encerado utilizando la técnica esquelética.

5.CONSTRUCCIÓN Y AJUSTE DE LA FORMA EN CERÁMICA

Condensación cerámica y control de humedad.
Procedimientos de construcción mediante la técnica de estratificación anatómica.

6. ESQUEMA OCLUSAL DE OCLUSIÓN FUNCIONALMENTE DISOCLUIDAD

Concepto de oclusión funcionalmente disocluida.
Rehabilitación oral completa por FDO.
Caso práctico tratado mediante el método FDO.

7. AJUSTE OCLUSAL DE DIENTES NATURALES

Objetivos y procedimientos del ajuste de dientes naturales.
Técnicas básicas de ajuste oclusal.

8. LA HISTORIA DE MI VIDA Y LA CORONA CERAMO-METÁLICA

La historia de mi vida y la corona de metal-porcelana (PFM).
Los gigantes me llevaron a construir la esencia de mi enfoque clínico.
Antes del nacimiento de la corona de ceramo-metálica.

En ocasiones la vida nos obsequia con algún regalo muy especial y esto es lo que ha ocurrido con esta obra que es más que un libro, es al mismo tiempo un legado, un homenaje y, sobre todo, nos descubre a una persona que además de la extensa experiencia técnica también nos narra sus vivencias en primera persona, entremezclando lo personal y lo profesional, porque Masahiro Kuwata fue testigo y protagonista en primera persona del desarrollo y difusión de la técnica de las coronas ceramo-metálicas (PFM) por todo el mundo.

Sus inicios no fueron fáciles teniendo en cuenta que cuando se trasladó a EEUU en los años 60, no hacía mucho tiempo que había terminado la Segunda Guerra Mundial y si a eso le sumamos su origen japonés, es fácil entender que no fue nada sencillo abrirse camino. Sin embargo, el empeño, el trabajo y una gran voluntad personal hicieron que se fuera ganando el respeto y la consideración de quien lo rodeaba, consiguiendo lo que él mismo describe como el sueño americano hecho realidad.

Por tanto, sin duda alguna, estamos frente a una figura fundamental en el campo de la cerámica dental, y además, forma parte por méritos propios de la historia dental ocupando el lugar privilegiado que se merece junto a otros gigantes del campo de la odontología.

Con este libro tenemos una gran oportunidad de descubrir y redescubrir su trabajo incluso su filosofía de vida y qué mejor manera de comenzar que con la enigmática frase que le dijo Gerry Katz al poco de trasladarse a EEUU de «panes y mantequilla». Esta enigmática frase le marcó profundamente y se refiere a lo esencial para la vida diaria, y que encontrar un propósito y vivir con determinación es una fuente de felicidad.

Durante los más de sesenta años involucrado en el campo dental siguió los principios básicos de la naturaleza, pensando en el mejor tratamiento dental para el paciente y lo que él denominaba las «tres emes» (fácil, eficiente y simple). Teniendo claro que para lograr una armonía funcional con el organismo es necesario planificar adecuadamente la «forma de la superficie oclusal».

En 1953 ingresó en la escuela más antigua de Japón en la formación de técnicos dentales de Aishikai (Dental Technical College, Japón). Y, como dato interesante, mencionar que en octubre de 1955 se promulgó la primera ley de protésicos dentales del mundo y en 1956 obtuvo el título nacional de Prótesis Dental.

Una fecha determinante fue en noviembre de 1962 cuando se trasladó a los EEUU (salió de Haneda rumbo a EEUU) donde trabajó en el laboratorio Mount Vernon en Nueva York.

En 1963 asistió a una demostración de coronas de porcelana de Gerry Katz y a partir de ahi se unió al equipo de desarrollo de las coronas ceramo-metálicas (PFM). Gerry Katz (técnica dental) estaba casada con el Dr. Sigmund Katz (químico), que a su vez fue el inventor del término Porcelana Fundida sobre Metal (PFM) o como se conoce popularmente como ceramo-metálica, metal-porcelana o metal-cerámica (comenzó su investigación y desarrollo en la década de 1940). El matrimonio Katz lo acogió en su hogar como si fuera parte de la familia. Gracias a esta relación tuvo la oportunidad de trabajar en uno de los laboratorios más importantes y desarrollar sus conocimientos profesionales.

Sin embargo, hay una fecha que marca un antes y un después, fue en 1964 cuando el Dr. Katz y Kuwata presentaron por primera vez una conferencia sobre las coronas ceramo-metálicas (Porcelana Fundida sobre Metal) (PFM).

Desde su presentación en EEUU estuvo impartiendo conferencias y cursos a lo largo del mundo, ganándose la admiración y el respeto de toda la comunidad dental.

La introducción de la PFM supuso un gran cambio teniendo en cuenta que, por ejemplo en EEUU, se utilizaban principalmente coronas de resina para los dientes anteriores mientras que en los dientes posteriores se utilizaban restauraciones metálicas.

A partir de los años sesenta se extendió de manera global el término PFM (Porcelain Fused to Metal) (Porcelana Fundida sobre Metal) (ceramo-metálicas), y todavía hoy en día siguen siendo unas restauraciones dentales muy utilizadas.

También hay que realizar una mención especial al concepto personal de Oclusión y que tanta importancia tuvo en sus restauraciones dentales. No en vano hay que recordar la anécdota cuando Masahiro Kuwata era joven y le enseñó una muestra de su trabajo (una restauración de cerámica) al doctor Schuyler (padre de la teoría oclusal) y este le preguntó: «¿sabes qué es lo más importante?» «Una restauración no tiene valor en la cavidad oral a menos que pueda funcionar satisfactoriamente». El doctor Schuyler le enseñó la importancia de dar forma a las restauraciones considerando la oclusión.

Lo que le llevó a que estas técnicas para las restauraciones dentales estén basadas en la Oclusión Funcionalmente Disocluida (FDO) propuesta por él mismo siendo una evolución de la oclusión PMS (Pankey-Mann-Schuyler) la cual establece que durante el movimiento lateral, solo el lado de trabajo hace contacto deslizante con las superficies de trabajo de los molares inferiores y las vertientes internas de los molares superiores basados en la guía canina (página 155).

Mientras que en el caso de la Oclusión Funcionalmente Disocluida (FDO) se establece una guía canina en el lado de trabajo durante el movimiento lateral, las superficies internas de los dientes posteriores de la arcada superior (superficie de trabajo) y las superficies funcionales de los dientes posteriores de la arcada inferior se separan instantáneamente.

Para entender y realizar este estilo de oclusión no hay más que seguir los 12 puntos básicos de la Oclusión Funcionalmente Disocluida (FDO) que se describen en la página 156 de este mismo libro.

Aprendió de los grandes, conoció y siguió activamente nombres que hoy en día ya forman parte de la historia de la odontología, como el Dr. C.H. Schuyler, Dr. S Katz, Gerry Katz, Dr. S. Wagman, Dr. Straussberg, Dr. R.S. Stein, Dr. Peter Dawson, al Dr. P.K. Thomas, Ronald Goldstein, R. Sheldon Stein y otros amigos que le llevaron a construir su propia esencia.

Y todo esto nos lleva a destacar su otra gran vocación que es la formación siguiendo fielmente el consejo que le ofreció Dr. Schuyler: «Lo más importante es transmitir activamente tus conocimientos». La transmisión es lo más importante y como tal impartió numerosos cursos por todo el mundo e incluso en 1966 volvió a trabajar en la Escuela de Formación de Técnicos Dentales de Aishikai donde él había estudiado, ahora sí como especialista en porcelana.

Al regresar de los EEUU fundó la clínica Kuwata, donde durante cuarenta y siete años recibió e instruyó a numerosos estudiantes de todo el mundo tanto odontólogos como técnicos dentales.

La formación de estudiantes fue fundamental a lo largo de su vida profesional, destacando que lo esencial es enseñar las técnicas prácticas, ya que aprender mediante la experiencia manual es fundamental por lo que recopiló todos los conceptos y técnicas en diferentes libros.

En el terreno personal hay un libro en particular que marcó un gran acontecimiento y que fue la publicación en diciembre de 1982 del «Atlas a color de tecnología Cerámico-Metal, volumen 1» y posteriores 2, 3 y 4. Más tarde fue traducido en diferentes idiomas incluido el castellano que fue publicado en España en 1988.

Para nuestro centro de formación también estos atlas, se convirtieron de inmediato en unos libros inspiradores, en una gran fuente de conocimiento e indispensables para la formación de la especialidad de cerámica dental. Muchos ex alumnos/as que hoy en día son grandes especialistas en la cerámica dental leyeron, estudiaron y aprendieron de las coronas ceramo-metálicas de Masahiro Kuwata.

En resumen, además de su indiscutible valor como obra técnica relacionada con las coronas ceramo-metálicas, también hay que destacar su ambicioso repaso que abarca desde la posición de trabajo (ergonomía del técnico dental) para permitir movimientos naturales sin esfuerzos (página 93), hasta el manejo de los dedos de las manos.

Asimismo, nos ofrece sabios consejos relacionados con el orden y la organización de la mesa de trabajo porque además de ser signos de profesionalidad, en un entorno desordenado, no se puede garantizar la producción estable de excelentes restauraciones dentales.

Sin olvidar la esencia en los capítulos dedicados a la anatomía, forma, función, estética y oclusión, desde la fabricación del patrón de cera hasta las propias coronas ceramo-metálicas.

Tiene curiosidades como que el caso práctico que se presenta en este libro se realiza sobre el propio Masahiro Kuwata (página 189). Y otra que a los más jóvenes y no tan jóvenes lectores les llamará la atención es la de ver imágenes de hornos de cerámica de cocción al vacío utilizando una olla de presión (página 145).

Y qué mejor manera que concluir este prólogo que con unas frases del propio autor: «Ya sea mediante encerado o modelado de datos mediante CAD, el objetivo de la forma dental es el mismo, solo que la herramienta utilizada es diferente. En el tratamiento de restauración en la era digital, se requiere una aplicación racional de CAD-CAM, impresoras 3D y Al, pero para dominar su uso en el sentido original de su propósito, es importante aprender la forma dental en función de los criterios clínicos y su base es el dibujo y el encerado» (Masahiro Kuwata) (página 114).

Fernando Folguera

Director del Centro de Formación Profesional de

Grado Superior Folguera-Vicent (Valencia).